Una de las épocas más agradables del año es la primavera, con la temperatura exacta para hacer ejercicio y actividades al aire libre. Es una muy buena oportunidad para empezar a realizar paseos distintos con tu perro, subir cerros, andar en bici,  llevarlos al campo, etc.

Una forma de que tu perro gaste energías y bajar la ansiedad, es olfateando. El sentido del olfato es uno de los más desarrollados junto con el oído. Al estar en lugares abiertos en la naturaleza, tu perro se va a estimular, ya que aprenden a través del olfato y va a conocer lo que es un paseo sensorial, intentando identificar que es y de donde viene cada nuevo olor que siente, despertando sus ganas de explorar y aprender.

 Los paseos no deben estar enfocados solo en cansancio físico, también debe ser mental. Tu perro es por naturaleza explorador, incursiona nuevos caminos con él, y vas a incluso conocer habilidades de tu perro que estaban dormidas, pero con un buen paseo en la naturaleza, los estímulos van a aparecer solos y su instinto cazador y explorador harán el resto.

Consejos para paseos sensoriales

1. Intenta no hacer el mismo camino siempre, ya que los olores y estímulos serán probablemente los mismos o muy parecidos y no van a llamar la atención de tu perro.
2. Usa una correa más larga de lo normal, para ayudar a tu perro a saciar su instinto explorador, de lo contrario estará tirándote de la correa constantemente, porque necesita ir a identificar los nuevos olores.
3. Si vas caminando y tu perro se para a olfatear, no lo tires de la correa. Déjalo que sienta distintos olores y estimule su cerebro. Debes detenerte junto a él, y esperarlo a que termine, si por algún motivo necesitas seguir avanzando, puedes hacer un pequeño llamado para desviar su atención, pero nunca tirarlo de la correa para que siga caminando.
4. Revisa nuestra noticia Explorando en Manada, donde te damos tips de lugares donde pueden explorar juntos.